Requiem a la voluntad

El día de hoy perplejo he quedado,
creí que lo peor ya había pasado.
El viento dispersa mi eufórico humor,
acompañado con un intenso dolor.

Tras aguantar no creí llegar hasta aquí,
pero después de todo al fin me rendí.
Aunque aquella línea parecía distante,
traspasada ha sido en tan sólo un instante.

Mi ser que un día estuvo en progreso,
su límite ha marcado su propio deceso.
Disculpa por lo que tendré de hacer
pero algún día habrás de entender.

La sangre ha empezado a correr
Y en la obscuridad habré de desaparecer.

Buen día tengan todos ustedes señores pasajeros, disculpen las molestias que les vengo ocasionado. Espero que esta pequeña poesía haya sido de su agrado. Como pueden ver no soy un gran poeta, pero de esta forma satisfago mi alma vacía. Con lo que gusten cooperar según sea su voluntad. No les pido dinero, les pido una sonrisa optimista para alimentar esta pobre y hambrienta creatura. Recuerden que este tren tiene un solo destino, y que aunque en estos momentos ustedes bajan antes que yo, al final en un futuro en la última estación me habrán de alcanzar. Así que por ahora disfruten el recorrido y deseo que lleguen con bien a su hogar, ya que por ahora sus familias los esperan…
Gracias.
-------------------------------------------------------


(Diego) Roberto Villegas Villasana

Comentarios

Entradas populares de este blog

El top 10 de lo inevitable

¿Cheetos sabor Naranja?

La película que más me impresionó