Discurso motivacionalmente sin motivos
Sí te preguntabas que qué había pasado conmigo, por qué me ausenté tanto tiempo de aquí, la verdad es que tuve que esconderme, huir del país por un tiempo debido a la amenaza que recibí el 5 de julio. Tuve tanto miedo que hasta cambié de identidad... y de sexo. Así que si ahora no me reconoces, lo entenderé. Pero también sé que pensarás que soy más atractiva... persona ahora. Pero bueno, digamos que ahora que regresé pues como quise retomar mi antigua identidad, ahora soy un travesti. Lo mejor de todo es que no se nota. ¡Jaja! Basta de delirios y retomemos. Últimamente he pensado mucho. Claro, es rarísimo porque yo no suelo hacerlo. Usualmente pendejeo en mis pensamientos. Sin embargo ahora más allá de meterme en un simple quehacer de pensar, he filosofado. ¡Guau! ¡Qué emocionante! ¡se siente tan bien dejar de ser un pendejo que piensa pendejadas para seguir siendo el mismo pendejo que filosofa pendejadas! Me agrada mi nuevo yo, me gusta ser taaaaan optimista. Esta tortura filosofal c