Violado, loco y divino.
El fin de semana pasado estuvo medio loco y lleno de enigmas. Creo que son de esas coss que no podré entender nunca, pero aquí va. Priemero, el viernes tuve la oportunidad de visitar un reclusorio. Lo más destacable es que me cae que perdí la virginidad de ser manoseado tantas veces cada vez que atravezaba un puerta. ¿Sabes cuál fue lo peor de todo? Todos se agazajaron conmigo y nadie siquiera me invitó un café o una chela o ni siquiera un teléfono y un "te llamo beibi". De alguna forma sí se siente un ambiente pesado. Ese mismo día por la noche, salía del metro politécnico y ¡madres! Un cabrón me llega por atrás y que me asalta. "¡Dame todo lo que traes!" me dijo, mientras sentí que me puso algo en la espalda y me agarró del hombro. "Mi cartera está en la bolsa de atrás de mi pantalón" le dije. Inmediatamente me empieza a manosear las nalgas mientras sacó mi cartera. "¿Qué más traes?" me dijo. En eso en el eje central un carro se dió un enfrenon